Se llama Carlitos y su dueño asegura que es bueno y no hace ruido.
Dice que lo pone en venta por tener problemas económicos.
La puja va por los 56,50 euros.
El vendedor explica que se ve "obligado a ceder la custodia" de su amigo invisible Carlitos "a una buena persona que necesite a alguien a su lado" por estar sufriendo "apuros económicos".
Además asegura que "es bueno, no hace ruido, no estorba ni molesta. Te hará compañía siempre que lo necesites y puedes contarle todo lo que quieras. Jamás se lo dirá a nadie. Lleva acompañándome desde mi infancia y es mi mejor amigo, pero ha llegado el momento de decirnos adiós".
Dan más de 50 euros
A parte de lo sorprendente del artículo puesto en venta, lo que más llama la atención es que alguien puje, como está sucediendo. La puja en el momento de escribir esta noticia iba por los 56,50 euros y once personas se peleaban por el artículo mencionado.
El vendedor fija un importe de 2,43 euros de gastos de envío, que es lo que cuesta que al comprador le llegue la carta que certifica que el amigo imaginario pertenece a otra persona. Es más, el documento compromete al que la recibe a "garantizar los correctos cuidados" que necesiten tanto Carlitos como la mascota.
Dice que lo pone en venta por tener problemas económicos.
La puja va por los 56,50 euros.
El vendedor explica que se ve "obligado a ceder la custodia" de su amigo invisible Carlitos "a una buena persona que necesite a alguien a su lado" por estar sufriendo "apuros económicos".
Además asegura que "es bueno, no hace ruido, no estorba ni molesta. Te hará compañía siempre que lo necesites y puedes contarle todo lo que quieras. Jamás se lo dirá a nadie. Lleva acompañándome desde mi infancia y es mi mejor amigo, pero ha llegado el momento de decirnos adiós".
Dan más de 50 euros
A parte de lo sorprendente del artículo puesto en venta, lo que más llama la atención es que alguien puje, como está sucediendo. La puja en el momento de escribir esta noticia iba por los 56,50 euros y once personas se peleaban por el artículo mencionado.
El vendedor fija un importe de 2,43 euros de gastos de envío, que es lo que cuesta que al comprador le llegue la carta que certifica que el amigo imaginario pertenece a otra persona. Es más, el documento compromete al que la recibe a "garantizar los correctos cuidados" que necesiten tanto Carlitos como la mascota.
1 comentario:
Y ya hay otro que se ha sumado a la moda y vende a su amigo Manu!!!
Hay gente pa' to'!
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